El brazo armado del SKA Minsk. Presente y, sobre todo, futuro de Bielorrusia. A sus 20 años ya sabe lo que es jugar un Europeo y un Mundial con su país y esto no es fruto de la casualidad, pues Uladzislau Kulesh posee un brazo hecho para destacar.
Perteneciente a una generación de jugadores bielorrusos que apuntan maneras para seguir la línea de la Bielorrusia de los últimos años que, guiada por el retirado Siarhei Rutenka, ha conseguido disputar los dos últimos Europeo y los tres últimos mundiales (el de Francia ya sin su estrella).
De esta generación destaca por encima de todos el pivote Artesem Karalek, ya en las filas del Saint Räphael. Karalek, también nacido en 1996, lo tiene todo para triunfar en el balonmano europeo y ya en este último Mundial de Francia demostró sus dotes siendo el principal protagonista de su selección y uno de los pivotes más destacados del torneo.
Por detrás del pivote del Saint Räphael, el jugador más prometedor de Bielorrusia es nuestro protagonista, Uladzislau Kulesh, aun vistiendo la camiseta del SKA Minsk, donde compartió vestuario con Karalek. Sus más de 2 metros de altura y su potente lanzamiento le señalan ya de por sí como un jugador interesante para los equipos de las grandes ligas europeas, pero su progresión en los dos últimos años es lo que le marca como un jugador tremendamente interesante.
Si el año pasado el SKA Minsk llegó hasta la fase de grupos de la EHF Cup, competición en la que Uladzislau Kulesh finalizó con 47 goles en 8 partidos, en esta temporada cayó en la fase previa ante el Saint Räphael tras una eliminatoria donde los bielorrusos dieron la cara ante el subcampeón de la LNH. En esa eliminatoria, al igual la anterior, en la que derrotaron al Alpla HC Hard austríaco, Kulesh tuvo un rol protagonista.
Ante el conjunto galo Kulesh se mostró como lo que es, un jugador con una potencia de lanzamiento bárbara que no perdona cada vez que llega a los 9 metros sin contacto. En la ida, que acabó con victoria para el SKA Minsk, metió 5 goles y en la vuelta 4.
Uladzislau Kulesh no es el típico lanzador que lo intenta a la mínima opción que tiene, si no que es un jugador mucho más frío que busca opciones claras de lanzamientos, las cuáles no desaprovecha. Como decía, cada vez que llega a los 9 metros sin un defensor encima saca el látigo.
Tiene mucho margen de progresión, se le ve un poco limitado en cuanto a movilidad pero ya es algo que ha mejorado. En la última temporada y media ha dado un paso adelante importante y además de lanzar conecta con cierta habilidad con el pivote. Llama la atención que juega andando durante muchos minutos del ataque pero eso sí, cuando le toca atacar va a fuerte a por la defensa.
Defensivamente es un jugador al que le falta pero teniendo en cuenta que tiene 21 años parte de una buena base. Con sus 2 metros se puede convertir en un jugador interesante también en el plano defensivo. Eso sí, ya con el nivel que tiene ahora está preparado para no tener que hacer cambio ataque-defensa. En SKA Minsk le hemos visto tanto defender en un segundo como en el centro del 6:0.
En definitiva, con Uladzislau Kulesh estamos ante un gran lanzador, que tendrá mucho que decir en el panorama europeo en los últimos años y que si se pule de la manera adecuada se convertirá en un jugador objeto de deseo de clubes importantes.
Edu Agulló | @Eduagullo
