Del todo a la nada. Eso le pasó a Suecia entre los años 2012 y 2013. De jugar la final olímpica los suecos pasaron a no jugar el Mundial de España en cuestión de meses. Ahora dos años después, el equipo que dirigen los legendarios Staffan Olsson y Ola Lindgren quiere quitarse la espina de no haber jugado la cita mundialista hace dos años haciendo un gran torneo en Qatar.

Con aquel precedente y el desilusionante Europeo de Dinamarca (la horrorosa segunda parte jugada ante Polonia le dejó KO) Suecia debe autoexigirse pelear por las medallas, por jugadores y por historia. Bien es cierto que sobre el papel hay selecciones mejores que Suecia, pero con una portería formada por Mattias Andersson y Johan Sjöstrand y con jugadores de la talla de Kim Andersson y Andreas Nilsson están obligados a soñar con lo máximo en este Mundial de Qatar 2015.

Los de Ola Lindgren y Staffan Olsson poseen una plantilla muy bien dotada, capacitada para ganar a cualquier selección, pero con un talón de aquiles perfectamente localizado. La retirada de Kim Ekdahl du Rietz ha dejado un hueco en el lateral izquierdo que será imposible de cubrir. Ahora la responsabilidad recaerá sobre los jóvenes Markus Olsson y Viktor Östlund, jugadores que aún no han salido de Suecia y que a pesar de poseer talento y un buen brazo, aún están lejos del jugador del Rhein Neckar Löwen.

Si bien es cierto que con la ‘incorporación’ de Kim Andersson, Suecia, por lo que supone el ahora lateral derecho del KIF Kolding, da un salto de calidad respecto al pasado Europeo, la baja de Ekdahl du Rietz resta mucho potencial a una selección que con él podríamos situarla perfectamente ensemifinales. Además, a la baja del jugador del RNL hay que añadir la ausencia del jovencísimo Jim Gottfridsson, que a pesar de tener tan solo 22 años ya ha demostrado estar capactiado para brillar en la elite y sin ninguna duda hubiera ayudado mucho a conducir el ataque sueco.

Dejando a un lado estas dos importantes bajas es evidente que el potencial de Suecia la sitúa entre las más fuertes del Mundial. Como antes decía, posee una de las mejores porterías del campeonato con dos porteros experimentados y que están acostumbrados a jugar bajo la exigencia de dos clubes como el THW Kiel y el SG Flensburg Handewitt.

En cuanto a los extremos, Suecia también tiene mucha calidad en ambos lados. Es cierto que tanto Niclas Ekberg como Frederik Petersen pecan un poco de irregularidad pero cuando están entonados son capaces de brillar al nivel de los mejores del mundo en su posición, sobre todo el zurdo del THW Kiel. Además, ambos jugadores estarán bien escoltados, sobre todo Petersen, que al contrario de lo que ocurrió en el pasado Europeo no tendrá la titularidad garantizada, pues Jonas Källman, sobre todo por todo lo que aporta a nivel defensivo, le restará muchos minutos al extremo del Füchse Berlin. En el extremo derecho, será Anton Halén el que se verá obligado a asumir el rol de extremo suplente a pesar de que está demostrando un alto nivel en el Frisch Aüf Göppingen.

Para completar esta segunda línea, Suecia cuenta con uno de los mejores pivotes ofensivos del mundo, si no el mejor a día de hoy. Andreas Nilsson, actualmente en las filas del Veszprém de Antonio Carlos Ortega, se ha convertido en un jugador imparable para las defensas rivales. Tal y como demostró en el pasado Europeo gran parte de las armas ofensivas suecas pasan por su trabajo en la línea de 6 metros, pues cada vez que consiguen contactar con él tiene garantizado el gol o un siete metros (en Dinamarca 2014 no falló ningún lanzamiento).

En donde Suecia tiene más problemas, como antes apuntabamos, es en la primera línea. Aunque realmente puede resultar extraño hablar de problemas cuando Staffan Olsson y Ola Lindgren tendrán a su disposición a jugadores como Kim Andersson y Lukas Karlsson, piezas fundamentales del ataque del KIF Kolding. Además, Suecia contará con hombres asentados en las grandes ligas europeas como son Johan Jakobsson, cuyo brazo es un prodigio y si tiene el día es imparable, y Patrik Fahlgren, director del ataque del MT Melsungen.

Además, Suecia posee una dura defensa en la que el capitán Tobias Karlsson impone su agresividad para contagiarla al resto de una defensa que si está bien conjuntada hará de Suecia un equipo extremedamente difícil de batir. Lo más habitual es ver a Suecia defendiendo en 6:0 con el propio Karlsson en el centro de la defensa y acompañado por Niclas Barud, aunque son varios los hombres que han utilizado Olsson y Lindgren al lado de Karlsson en los últimos partidos de Suecia.

Para concluir se puede decir que Suecia tiene potencial de sobra para pelear por las medallas pero los jugadores que asumirán la responsabilidad son, en muchos casos, capaces de lo mejor y de los peor. Aún así, con la dupla Andersson/Sjöstrand y con Andreas Nilsson suben las posibilidades de que veamos a una Suecia al más alto nivel.

Edu Agulló | @Eduagullo