Víctor García ‘Pillo’ | @VictorG_Pillo

Como ya viene siendo habitual, el fantástico show del Lanxes Arena echa el cierra a la temporada 2022/23, apasionante, llena de emoción, interés y espectáculo; tanto en nuestra Liga Plenitude Asobal, como en las diferentes competiciones organizadas por la European Handball Federation.

Las Final4 son torneos duros y exigentes, física y mentalmente.

Al margen de las dificultades estrictamente deportivas derivadas de la calidad de los equipos  participantes, en estos torneos de fin de semana, adquieren importancia vital circunstancias que en otro momento de la temporada quizás no son tan decisivas. Así, por ejemplo, cualquier puntual lesión, por leve que sea, sin margen de tiempo para recuperación, dejará al jugador fuera del torneo. Igualmente, la estabilidad social del club, las urgencias y expectativas de cada uno de los equipos e incluso la ansiedad pueden influir en el rendimiento.

Por todo esto, más de una vez, los pronósticos han saltado por los aires.

En función del cumplimiento de los objetivos fijados por cada uno de los equipos, afrontarán su participación con más o menos carga en la “mochila de presión”.

En este sentido el FC BARCELONA se presenta inmaculado: todos los títulos nacionales conseguidos, ni una sola derrota en la EHF Champions League y, en principio, con todos los jugadores a disposición de su entrenador. Ahora bien, esta sensación de placidez puede no ser buena compañera de viaje.

Consciente de que la relajación es el principal enemigo de la competición, comentaba Antonio C. Ortega que había tenido que “pinchar un poco al equipo” advirtiendo que el Lanxes no da respiro y cualquier atisbo de laxitud, aunque sea momentáneo, se paga muy caro.

De entrada, en semifinales luchará con su auténtica “bestia negra” en los últimos tiempos: SC MAGDEBURG, campeón de las 2 últimas ediciones de la IHF Super Globe, en ambas derrotando en la final al FCBarcelona. Tercer enfrentamiento en los últimos años y esperemos que “a la tercera vaya la vencida”.

Curiosamente, si es campeón, sería el tercer título consecutivo. Nuevo hito histórico con este formato de competición.

Los alemanes se presentan en el torneo como actuales subcampeones de la última Bundesliga (campeón Kiel) y también subcampeones de Copa (campeón Rhein-Neckar Löwen).

Con Saugstrup y Gisli Kristjansson recuperados de sus lesiones, solo faltará a la cita el fantástico lateral derecho islandés Omar Ingi Magnusson.

Se ganaron la final4 superando, no sin ciertos problemas, en cuartos al Wisla Plock. Determinante en la victoria, la sensacional actuación del lateral derecho neerlandés, Kay Smits, autor de un estratosférico 14 de 16 en el partido de vuelta.

Smits es el máximo goleador del equipo tanto en Bundesliga (190 goles) como en EHFCL (78 goles). Jugador potente, explosivo con muy buen 1×1, especialista en letales penetraciones entre 1º y 2º defensores, y buen lanzamiento de media distancia.

Sobre las espaldas del central islandés Kristjansson y Smits se sustentan gran parte de las opciones del juego de ataque alemán.

Completan su excelente 1ª línea los laterales izquierdos: el danés Damgaard Nielsen, el alemán Weber y el esloveno Bezjak, que comparte puesto de central con el omnipresente y completísimo noruego Christian O ‘Sullivan. Auténtico “capo” del equipo. Lipovina entra en rotaciones para dar descanso a Smits.

La 2ª línea es clave para aplicar el juego rápido tanto en contrataque directo o en 2ª oleada como ejecutando contragol.  El extremo derecho Hornke es su 5ª goleador con 101 goles en Bundesliga, lejos de los 190 de Smits. Comparte puesto con el sueco Petterson autor de 45 goles esta temporada. Por la zona izquierda Martens (70 goles) y Musche (50 goles) se reparten minutos.

El suizo Meister, Bergendahl y Saugstrup alternan el puesto de pivote y forman, junto al polaco Chrapkowski, la potente zona central del férreo 6:0 defensivo, que juegan casi en exclusiva.

Suelen utilizar 1 o 2 cambios en ataque-defensa, lo que no supone obstáculo para dar al partido un altísimo ritmo de juego. Contragol, ataques cortos y explosivos “apretando” mucho en la primera circulación de balón, son señas notas de su modelo de juego.

Los primeros minutos de la última SuperGlobe fueron claro ejemplo del vertiginoso ritmo que imprimen a su juego, una auténtica “hemorragia” de ataques, contraataques y recontraataques, del que salió victorioso el equipo alemán, que incluso llegó a obtener ventajas de hasta 6 goles. 

En situaciones de superioridad suelen jugar 4:2 con Saugstrup y Bergendahl en el pivote ubicándose, uno abierto entre 1y2, y el otro entre los 2 centrales, con objetivo de fijar a los defensores, alternando finalizaciones juego 2×2 con cualquiera de los 2 pivotes o trasladando el balón lateral contrario con mucho espacio para penetrar o jugar 2×2 con extremo y mucho espacio.

A pesar de los altos guarismos en los resultados de ambos equipos , en esta semifinal se enfrenta dos de las 3 mejores porterías de la EHFCL: Barça 1ª y Magdeburgo 3ª. Portner y el gigantón danés Jensen (207cm) alternan en la portería, que la próxima temporada ocupará “nuestro” Serguei Hernández. En la Bundesliga promediaron 28,25% y 28,95% respectivamente.

En el recuerdo todavía la fantástica actuación de Portner en la última SuperGlobe, sobre todo en los minutos iniciales. Con sus paradas sacó del partido a los catalanes.

Toda esta pléyade de buenos jugadores junto con su condición de local, hacen de Magdeburgo un rival peligroso, por eso, ante este escenario parece oportuno el “pinchazo” que Antonio Carlos Ortega propinó a sus chicos antes de pisar el Lanxess Arena.