El próximo viernes 15 de enero comenzará en Polonia la decimosegunda edición del Campeonato de Europa en categoría masculina. Durante 16 días el balonmano será el centro de atención en un país que quiere que su selección, que llega a la cita como tercera del mundo, selle su clasificación para los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro.

Durante estos días Polonia será noticia por motivos deportivos pero en los últimos meses ha sido foco de atención en Europa por motivos bien distintos. Lo fue después de que su presidente Andrzej Duda firmase la ley de reforma del Tribunal Constitucional, que limita drásticamente las competencias de los jueces y modifica, entre otros, el sistema de votación. Esto supone que el ejecutivo tendrá carta blanca para modificar leyes como la que asegura la libertad de medios de comunicación e incluso cambiar la Constitución para hacer una prohibición expresa del aborto o del matrimonio homosexual. En este último punto es donde Polonia ha sido el centro de las críticas durante los últimos años.

Tristemente aun hay países europeos que no reconocen el matrimonio homosexual y Polonia es uno de ellos. El país que acogerá el Europeo no acepta regímenes de familia «que no responden a sus valores ni están en su constitución.» Y la EHF ha cedido a as presiones del gobierno sueco y ha paralizado la iniciativa de Tobbias Karlsson, capitán de Suecia, y a la que también se querían unir los capitanes de Islandia y Noruega.

Ante la situación que se vive en polonia había respondido el especialista defensivo sueco Tobbias Karlsson, al que ya le vimos lucir en Irún un brazalete de capitán con la bandera arco iris. Y así pretendía que fuera durante todo el Europeo salvo que alguien se lo impidiese, como así ha sido. “Pregunté si podía utilizarlo durante el Europeo y la Federeación no me puso ningún problema. También les pedí que mirasen que no haya reglas que me lo impidan. Si no me lo prohiben jugaré todo el torneo con este brazalete”, comentaba el jugador del SG Flensburg-Handewitt ante preguntas del medio sueco Aftonbladet antes de recibir la prohibición de la EHF.

Ahora, tras la prohibición el duro defensor sueco se muestra muy sorprendido por la decisión. «Hace unos días nos habían dicho que todo estaba bien. Es triste que la EHF haya tomado la decisión de no dejarnos expresarnos con libertad ante situaciones contra las que no estamos de acuerdo», afirmaba el jugador sueco.

Tobbias Karlsson reconocía que la idea de utilizar el brazalete con la bandera LGBT no fue idea suya si no que fue iniciativa del jugador del IFK Kristianstad, Johan Jepson, que no está convocado para la cita europea. En cuanto Jepson se lo comentó al capitán sueco éste no lo dudó ni un momento y rápidamente se puso en contacto con la Federación de su país. “Esto no es una protesta es una manifestación silenciosa a favor de la igualdad y aceptación de todas las personas”, afirma Tobbias.

Lo vimos en España luciendo con orgullo la bandera arco iris pero en Polonia no lo podrá hacer, a Tobbias Karlsson no le permitirán demostrar desde la pista su total rechazo a políticas homófobas como la del gobierno polaco. Gracias a Suecia el balonmano europeo le había marcado a Polonia el primer gol del torneo pero ‘in extremis’ el gobierno polaco ha conseguido detenerlo, sobre la línea, con un movimiento de la EHF que nos avergüenza a todos.

Edu Agulló | @Eduagullo